El coche nuevo más caro del mundo es un Rolls-Royce, pero de momento nadie podrá comprarlo. No solo por su precio de 28 millones de dólares, sino porque solo se ha fabricado una unidad y sus medidas han sido diseñadas para un cliente anónimo. El nuevo vehículo lleva por nombre Rolls-Royce Boat-Tail.
Cada coche que sale de esa planta suele ser el resultado de pedidos especiales de una persona con mucho dinero. El último auto más caro del mundo también salió de esta fábrica.
El maletero del carro tiene dos refrigeradores hechos a medida para albergar botellas del champán Armand de Brignac. Además están diseñados para mantener el champán a exactamente 6 grados Celsius, que es la temperatura a la que hay que servirlo. Adicionalmente, se incluyen copas y accesorios a juego.
El compartimiento de copas del vehículo.
Otros detalles del vehículo son que sus puertas tienen parasoles ocultos y el maletero una sombrilla desplegable. Las mesas de coctel se despliegan, “con una elegante rotación que imita el ofrecimiento de un sirviente”.
Los cajones del auto incluyen un compartimiento exclusivo para un reloj suizo Bovet 1822 de diseño exclusivo. Los precios de estos relojes se encuentran entre unos cientos de miles de euros y los dos millones y medio.
